
La Expedición 339 del Integrated Ocean Drilling Project (IODP), Mediterranean Outflow, tuvo lugar entre noviembre de 2011 y enero de 2012 a bordo del buque oceanográfico Joides Resolution. En la expedición, compuesta por 35 científicos de 14 nacionalidades, se recuperaron un total de 5 km de muestras de sedimentos del sustrato oceánico, en el Golfo de Cádiz y Portugal, un área, que pese a la proximidad con el continente, hasta el momento no se había perforado con técnicas de estas características. Los científicos participantes encontraron nuevas evidencias de una pulsación tectónica profunda, recuperaron una secuencia climática continua y resolutiva, así como nuevas aportaciones relacionadas con la exploración de hidrocarburos y gas que podrían influir decisivamente en la explotación de la región.